Nuestra comprensión sobre el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) ha cambiado mucho durante las últimas décadas.  La gente solía preocuparse de que transmitiría el virus a través del contacto casual. Hoy en día sabemos que el simple hecho de compartir habitación no pone a nadie en riesgo de infectarse por el VIH. La buena comunicación y estar al tanto de cómo mantener la salud y el bienestar mutuos son fundamentales para que la cohabitación tenga éxito.

Las personas que toman medicamentos para el VIH cuyas cargas virales son indetectables tienen una baja probabilidad de transmitir el virus. Si una carga viral es indetectable, significa que hay tan pocas partículas de VIH en el torrente sanguíneo que estas no pueden medirse mediante pruebas estándar. En nuevas investigaciones se ha comprobado que, si la carga viral de una persona permanece indetectable por un período prolongado, esta no puede transmitir el VIH a su pareja durante las relaciones sexuales. Las personas con VIH son mucho menos propensas a enfermarse en general si tienen una cifra de CD4 más alta, ya que las células CD4 ayudan a combatir las infecciones.

1. Abastezca su baño de suministros

La sangre, el semen y los líquidos vaginales pueden contener el VIH. Por lo tanto, es aconsejable que tome precauciones adicionales para evitar transmitir el VIH al lidiar con estos líquidos. Tener a mano los suministros adecuados, como vendas y bolsas desechables, ayuda a prevenir la exposición accidental.

Los artículos sucios que no pueden descargarse en el inodoro (como los tampones y las curitas) deben desecharse cuidadosamente. Séllelos dentro de una bolsa de plástico antes de tirarlos en un bote de basura. Al tomar esta medida protegerá a la persona que le toque vaciar la basura.

Si mantiene sus medicamentos en el baño, asegúrese de guardarlos en un lugar seguro fuera del alcance de niños u otras personas y en el que sepa dónde encontrarlos en todo momento. Recuerde revisar periódicamente las fechas de vencimiento de sus medicamentos para el VIH y deseche como corresponde los que estén vencidos o los que ya no se necesiten. 

2. Prepare los alimentos sin correr riesgos

El VIH debilita el sistema inmunitario, por lo que al cuerpo se le dificulta defenderse contra intoxicaciones alimentarias. Si bien algunas personas no lo pensarían dos veces antes de comer huevos con la yema líquida, sushi crudo o filetes y hamburguesas término medio, las personas con VIH son más propensas a infectarse con una bacteria gastrointestinal cuando ingieren alimentos semicrudos.

Mantenga la inocuidad de los alimentos en casa tanto para usted como para los demás siguiendo consejos básicos sobre la higiene de los alimentos. Lávese las manos con frecuencia, especialmente antes de preparar la comida y después de tocar carne, aves o mariscos crudos o sus jugos. Use agua caliente con jabón para lavar platos, tablas de cortar, superficies de trabajo, utensilios y trapos secadores. Nunca reutilice platos o utensilios que hayan estado en contacto con carnes o mariscos crudos hasta que se hayan lavado completamente. 

Antes de cortar frutas y verduras frescas, enjuáguelas con agua corriente y séquelas con una toalla de papel. Los productos agrícolas duros como las papas tienen que restregarse antes de ser preparados.

Asegúrese de descongelar y cocer adecuadamente los alimentos. No descongele los alimentos congelados a temperatura ambiente. En su lugar, déjelos en el refrigerador por la noche. Los termómetros de alimentos le indican cuando la comida ha alcanzado la temperatura recomendada durante la cocción. Evite dejar la comida reposando a temperatura ambiente por largo tiempo después de cocida porque las bacterias pueden proliferar rápidamente cuando los alimentos están a una temperatura de entre 40 y 140 grados Fahrenheit. Recuerde mantener a la temperatura correspondiente los alimentos fríos y calientes, y ponga los perecederos en el refrigerador o congelador dentro de una o dos horas. 

El agua que bebe y con la que cocina también puede causar enfermedades. Consiga en una tienda un filtro de agua, compre agua embotellada o hierva el agua de la llave en la estufa antes de usarla en la cocina para reducir el riesgo de enfermarse. 

3. Use guantes para hacer el aseo

Use guantes desechables si existe la probabilidad de que entre en contacto con líquidos corporales al limpiar ropa o sábanas sucias o cualquier otro tipo de inmundicia (como un vómito). Es importante que sigan este consejo incluso las personas que no han sido infectadas por el VIH, ya que ayuda a prevenir la propagación de otras enfermedades. Los guantes pueden mantener las cortaduras pequeñas o llagas cubiertas y protegidas contra la exposición a virus, incluido el VIH.

Si tiene el VIH, lo mejor es que minimice su riesgo de infecciones y enfermedades usando guantes al realizar trabajos que impliquen suciedad. Usar una mascarilla al limpiar el lecho de arena higiénica de las mascotas evitará que inhale el polvo de arena contaminado que pudiera contener microbios. Lo ideal sería que un integrante del hogar que no tenga el VIH sea quien se encargue de limpiar los lechos de arena higiénica de las mascotas, cambiar los pañales o llevar a cabo otros quehaceres potencialmente peligrosos.  Usar guantes y mascarillas durante estas actividades y lavarse bien las manos después puede hacer que estas personas sean menos peligrosas para quienes sean inmunodeficientes.

4. Use afeitadoras y cepillos de dientes individuales  

Aun si se ven limpios, la afeitadora y los cepillos de dientes pueden tener pequeñas cantidades de sangre y no deben compartirse con los demás. En su lugar, compre afeitadoras desechables de un solo uso y mantenga sus artículos personales apartados de sus familiares y compañeros de vivienda. Tenga sumo cuidado y mantenga estos artículos fuera del alcance de los niños. Compre artículos de diferentes colores o marcas, o designe su propio cajón en el baño.

5. Evite las infecciones oportunistas

A nadie le gusta enfermarse. No obstante, las personas con VIH con un sistema inmunitario débil deben tomar aún más precauciones para evitar las infecciones oportunistas que pueden atacar cuando el sistema inmunitario está deprimido. Las personas con VIH que tienen una baja cifra de CD4 pueden enfermarse gravemente de algo tan simple como un resfriado. De hecho, las infecciones oportunistas representan una de las mayores amenazas para las personas con VIH.

Cuando otras personas estén enfermas en casa, trate de guardar su distancia. Lávese las manos con frecuencia y aliente a los demás a que hagan lo mismo. De ser posible, abra las ventanas para permitir que el aire fresco ventile los espacios interiores. Use toallitas desinfectantes para limpiar superficies que se tocan a menudo, como pomos e interruptores de luz. Mantener a todos los integrantes del hogar al día de su atención médica y vacunas también contribuye a frenar la propagación de enfermedades. Avise a su médico si las personas con las que cohabita no se sienten bien, ya que es posible que le recomiende tomar antibióticos o que tome otras medidas de precaución. 

6. Consulte con su proveedor de atención médica

Ciertas situaciones como la lactancia materna, compartir agujas o la actividad sexual (en alguien con VIH que tenga una carga viral detectable) aumentan el riesgo de la infección por el VIH. Según la dinámica interpersonal con quienes conviva, es posible que deba tomar precauciones más específicas. Sin embargo, el estado de VIH no debería ser un impedimento para mudarse con amigos, familiares o compañeros de piso. Manténgase al día de su tratamiento para el VIH y cuidados personales, y pregunte a su médico si no sabe con certeza si pudiera estar poniendo en riesgo su salud o la de otras personas. Convivir con otras personas puede ser una buena fuente de apoyo. No hay motivo por el que no pueda hacerse de forma segura si se presta un poco más de atención a los detalles.

Hable con otras personas que entienden su situación

En myHIVteam, la red social para las personas con VIH y sus seres queridos, más de 40,000 personas con VIH se congregan para hacer preguntas, dar consejos y contar sus historias.

¿Qué medidas toman usted y los integrantes de su familia que no han sido infectados por el VIH para llevar una vida sana al compartir habitación? Publique su opinión en los comentarios a continuación o empiece una conversación en su página de Activities [Actividades].